En el año 1971, la casa Ford,lanzó al mercado estadounidense el Ford Pinto, un vehículo compacto con el que pretendían hacer frente a vehículos importados de tamaño más reducido.
Este modelo fue todo un éxito, vendiendo más de 400.000 unidades durante el primer año, poniéndose al nivel de ventas del Torino o del Mustang de la época.
El Pinto era un coche bonito, barato y divertido, aunque Ford al poco tiempo empezó a darse cuenta que muchos de eso vehículos se quemaban o explotaban. ¿Por qué? Porque el depósito de gasolina estaba detrás del eje trasero, o sea, casi justo detrás del parachoques. En un choque por alcance lateral o trasero, aunque fuera pequeño, el depósito chocaba contra el diferencial, normalmente se rompia y se incendiaba, llegando incluso a explotar.
Debido a que en su construcción se siguieron unos criterios económicos muy estrictos, la calidad de los materiales hacía que en caso de impacto, al ser la carrocería muy endeble, las puertas se bloquearan dejando a los ocupantes encerrados en el coche en llamas.
Ford estudió poner un refuerzo en la estructura para proteger el depósito, aunque finalmente no lo hicieron, no sabemos si porque les salia más rentable asumir las posibles demandas a modificar la estructura del coche.
En 1980 fué sustituido por el Escort americano.
No sabia la existencia del Ford Pinto... Afortunadamente hoy los tiempos han cambiado, y aunque todas las compañias de automoviles, siguen buscando la manera de reducir costes, estos no afectan a la seguridad (al menos en Europa).
ResponderEliminarMe parece una curiosa tematica para el blog, ya que fracasos hay muchos, lo que ocurre que muchas veces o no nos acordamos, o no nos enteramos.
Saludos,
Me han gustado mucho tus bocetos, no has tenido que buscar una temática extraña, sino conocida por todos con elementos comunes. Veo que dibujar se te da mucho mejor que a mi, y aunque no soy el más apropiado porque yo he arriesgado poco en mis bocetos, quizá deberías haberte lanzado a algo más complicado.
ResponderEliminarSaludos,